jueves, 31 de marzo de 2011

Energía positiva


El día ha amanecido despejado, lleno de luz y cargado de buenas energías.
Nos da ese empujón para que todo salga bien, para que tengamos buen humor y abracemos poco a poco el calor que ya viene.
Me he levantado llena de energía, pero he cargado aún más las pilas con este día soleado. Me siento feliz, alegre y con ganas de comerme el mundo.

Los rayos del sol ya empiezan a dorar mi piel, mientras me paseo por mi pequeño edén, éste que para muchos es sinónimo de vergüenza, de poca civilización, de abandono, pero que para otros es un lugar de escape, donde sentirse bien, rodeado de paisajes magníficos y en el se respira frescor por cada poro de la piel.

Dan ganas de saltar, de gritar, de fusionarse con el paisaje. Como ya he dicho los rayos del sol, van dorando esta piel, que tras estar tanto tiempo resguardada del frío, necesita de esa vitamina que solo le proporciona esa gran bola de fuego. Se empieza a sentir ese calor, que con tantas ganas deseo que llegue, para poder estar como hoy, paseando de camino al trabajo contenta, (aunque determinadas personas se empeñen en cambiar esto), admirando todo aquello que me rodea y sintiéndome llena de cosas positivas, dando de lado lo oscuro del camino.

Da gusto sentirse así, ver que todo el mundo está contento, que salen a disfrutar del día.

Parece mentira, pero e calor del sol, nos calienta por dentro y hace que veamos las cosas de distinta manera, de forma mas positiva y con alegría.

Hoy siento que soy feliz, que tengo todas aquellas cosas por las cuales una persona puede sentirse llena, familia, amigos, un lugar donde vivir que nunca cambiaré, aunque algún día mis pies me lleven a otro lugar…

Siento que te tengo a ti, a esa persona que quiero tener siempre a mi lado, que hecho de menos cada segundo y que me llena de vida, de ganas de seguir para adelante, de formar un futuro común.

Definitivamente hoy soy feliz, estoy contenta, llena de energías positivas, que intento transmitir a los demás. Por eso quiero dar gracias a todos los que ayudáis a que esto sea así.
Gracias sol, por trasladar hasta mi toda tu grandeza y calor!!




viernes, 25 de marzo de 2011

Brilla por ti misma, no te dejes influir

Alta, delgada, ojos claros, rubia, con curvas, guapa…
¿No todas somos así verdad? ¿Y qué? ¿Qué pasa? ¿Por eso somos menos?
Rotundamente ¡NO! Estoy harta de etiquetas, de clasificaciones que te meten en un saco o en otro, simplemente por el físico, por las opiniones de la gente.
¿Quién dice qué es la belleza?, ¿Quién pone ese canon del que la gente habla? y peor aún, el que la gente intenta conseguir, sabiendo en su interior que es imposible!!
La belleza se encuentra en las diferencias de cada uno/a. Lo que nos hace especiales, es lo diferente, lo raro, aquello que nos caracteriza y que los demás no tienen. Ese algo que te diferencia de tu amiga, de tu hermana, esa que es alta, guapa y vale para modelo, pero que no es más que tú por eso.
Nos implantan un canon de belleza que no es real. Las diosas no existen en esta realidad. Dejemos de intentar parecernos a todas esas famosas que son mitos para los hombres, esas que salen en las revistas, la mayoría de las veces con mil potingues de esos que tienes tu en tu tocador, pero que no quedan igual; Con mil retoques de photoshop, sin arrugas, sin manchas, sin expresión, sin ese algo que tu tienes y que te caracteriza.
Sí, lo sé, pero están ahí y son alabadas por el mundo entero, ¿y qué? Si os fijáis, todas acaban siendo iguales. Poses aquí y poses allá, corriendo de aquí a allá, casi sin comer, para simplemente salir guapa en una foto, foto que después vemos nosotras y se nos cae la baba de lo guapas que salen ¿verdad?
Tenemos que darnos cuenta de que no todas podemos ser guapas, tener talla 36-38 y medir 1.80. NOOOO… (y menos mal) Tenemos que saber que cada una tenemos algo especial, algo que podemos enseñar y lucir, de lo que sentirnos orgullosas, sin fijarnos en esos cánones de belleza inventados e impuestos en esta sociedad.
Hay que aprender a ver nuestros puntos fuertes, saber potenciarlos, vivir con los defectos y superarlos y aquellos que no se puedan superar, ¡aprender a vivir con ellos!
Por que estoy harta de ver a chicas en los huesos, destrozándose la vida, y ese cuerpo que creían que era una carga para ellas, pero que en realidad es todo lo que tenían y lo que les podía hacer feliz. Harta de ver en la televisión, que la talla perfecta es la 36, que si no tienes pecho, ningún hombre te va a mirar, y que si no eres guapa no vas a triunfar en la vida. !!Harta!!
Intentemos mirarnos con más autoestima y cariño a nosotras mismas, porque si no nos queremos nosotras, ¿quién lo va hacer? Intentemos dejar de preocuparnos de lo negativo que dicen de nuestro cuerpo y miremos las cosas bonitas.
Quizá no peses 60 kilos y peses 90, pero tendrás unos ojos bonitos que nadie pase desapercibido. Saca lo bonito de ti y convive con eso que tú ( y quizá solamente tú) veas feo.
Y a todos los demás, por favor, potenciar aquello que brilla de cada una de nosotras, no os fijéis en la oscuridad, porque si lo hacéis estaréis ayudando a que esa persona deje de brillar.

lunes, 21 de marzo de 2011

¿Qué quieres ser? Florero o flor... En ti está

No quiero parecer de la Edad Media, (aunque alguno/a así lo crea) pero sí quiero ver la verdad que se esconde en esta realidad. Oigo por ahí, a muchas chicas que dicen que no son tratadas como deberían de serlo, que los chicos se aprovechan de ellas y que no saben tratarlas como reinas.
¿Pero a qué punto estamos llegando? No se dan cuenta que son ellas las que provocan estas cosas. Es genial salir de fiesta con libertad, pudiendo bailar, beber, fumar, tontear…, lo que sea. ¿Pero en mi opinión, creéis que salir pensando en que pedo me voy a coger, y a que tío me voy a “tirar” va a provocar en los chicos ganas de trataros como a princesitas? Pues en mi cabeza “arcaica” NO, no os quejéis después.
Lo que se consigue así es que venga un chico y os trate como pilinguis, que os use y os tire, que se aproveche de vosotras, pues total después no os vais a acordar de lo que habéis hecho, y si hay algún problema va a ser para vosotras, os lo habéis ganado.
Queremos ser tratadas como muñequitas delicadas, que nos cuiden de vez en cuando. Es lo que me llega a mi en historias de gente conocida. Pero que pasa, nos ponemos un escote, enseñamos más de lo que debemos (La cosa está en provocar no en enseñar) y nos creemos que así vamos a ser estupendas y que los chicos van a venir detrás. Sí, tenéis razón, vienen. Llegan, te dicen dos cosas bonitas, mojan y si te he visto no me acuerdo.
Ellos buscan esto, pero en chicas que no quieren para más. Pero también buscan esa chica que se quede a su lado, que disfrute con ellos, que haga cosas que otras chicas no conseguirán darles. Se cansan de la chica buenorra que les calienta, quieren una que se quede a su lado y que no sea una cualquiera. ¿Cuál queréis ser?. Yo en vuestro lugar no lo dudaría.
¿Nos preguntamos por qué es tan difícil echarse un novio/a hoy en día? Creo que está claro. Hemos dejado de lado los sentimientos, para dar rienda suelta a nuestro lado más provocativo, para conseguir que… ser un florero, que no sirve para más, una vez roto.
Se que muchos/as diréis que vaya pensamiento tengo, pero algún día mirareis atrás y diréis que, qué razón hay en alguna de mis palabras. Cuando os canséis de ser la muñequita chochona y el terror de las nenas, y os veáis solas/os, queriendo tener a una persona al lado, que no sea solo para pasar un rato, si no para pasar toda una vida.
En vuestra mano está la elección, escoger y luego no os quejéis.

jueves, 17 de marzo de 2011

Amigos...

¿Qué son los amigos? ¿Esos que cuando te ven de fiesta vienen y están un rato contigo, pasándoselo bien?, esos que cuando te ven se acuerdan y te preguntan ¿qué tal va tu trabajo o cómo te va en la vida?, ¿esos que te quieren para ir un día al cine, porque no tiene con quién? ¿Eso son los que llamas amigos? Sería triste pensar que esos son los que una persona considera amigos.

Tenemos que saber distinguir a esos coleguillas, amiguetes, de los que realmente son amigos verdaderos. A veces es difícil distinguirlos, porque los amigos de verdad hacen muchas cosas que hacen los amiguetes o colegas. Los amigos salen de fiesta contigo (si es que pueden, no todo el mundo sale o tiene ganas), te preguntan que tal el trabajo, que tal tu vida, van al cine contigo… Pero a diferencia de los colegas, los amigos hacen esto citado más a menudo, me atrevería a decir que todos los días.

Además, añado, los amigos de verdad, están presentes en tus días buenos, felices y de celebraciones, como esos amiguetes y colegas.
El problema viene cuando un día no te encuentras bien, no te apetece salir porque te ha ocurrido una desgracia, no tienes ánimo ni siquiera para charlar o tomar un café o simplemente tu humor no tiene su día. ¿Qué pasa aquí con esos amigos que crees que son de verdad? Desaparecen como la espuma. Te dicen que no pueden ayudarte porque tienen que ir  con su madre al médico, que tiene que trabajar o cualquier escusa que en ese momento se les pase por la cabeza, y tú, como tonto/a te lo crees, para después enterarte que lo que ha hecho es ir a tomar unas cañas con su otro/a amigo/a que si tenía buen humor ese día.

Ahí realmente te das cuenta, de que tu amigo de verdad, no ha hecho eso, tu amigo de verdad, te ha llamado en cuanto ha podido y se ha enterado de lo que te pasa, tu amigo de verdad ha ido a tu casa a ver como estás, tu amigo de verdad es el que ha dejado que le mojes su sudadera con tus lágrimas y te ha animado a que levantes la cabeza y le regales una sonrisa.

Ese es el de verdad, ese que te ayuda cuando lo necesites sin que se lo pidas, ese que te anima, que te da consejos y no te critica a las espaldas y si lo  hace lo hace delante de ti, no como una crítica, si no como una ayuda para que mejores en eso que no has hecho bien. Es el que te dice las realidades, no lo que quieres oír, aún sabiendo que te va a doler, pero sabe que te va a servir de ayuda.
  
Un amigo es aquel que sufre cuando te ve llorar, el que te quiere, aquel que no duda si en algo te puede ayudar y que para bien o para mal, nunca te abandonará.
 

miércoles, 16 de marzo de 2011

Hablemos de lo que era y lo que es...

En una tarde en el que el día llora y parece que no encuentra consuelo, en el que no hay un alma en la calle y parece que nada importa, me pregunto ¿Qué está pasando con vosotros? ¿Por qué estáis olvidando esas cosas bonitas que hacen sonreír a cualquiera?

Se dice que las relaciones ya no son lo que eran, ahora tienen fecha de caducidad antes de fabricarse. Se parecen a simples amistades, que un día te hicieron levantarte feliz y al otro día te traicionaron. Usar y tirar es lo que se lleva.

¿Qué es lo que ha llevado a qué esto sea así? ¿Por qué me siento un bicho raro y me considero afortunada en esta sociedad que avanza sin frenos?
La respuesta la sé. Porque aproveché la oportunidad de encontrarle, de quererle como se quiere a una persona que día a día te ayuda a levantarte con una sonrisa, porque no le usé, ni se aprovechó de mí. Porque vimos ese algo que está desapareciendo en muchas personas.

En su día me dieron un consejo, que no olvidé. Y es el que hace posible que las cosas duren. Cada pareja tiene una cuerda, sujetada por los extremos, está no puede estar tensa, pero tampoco flácida. Este es el punto perfecto. Cuando uno tire el otro cede, pero nunca debe de tirar ni de ceder el mismo, sino se acabará rompiendo.

Si esto ocurre, irán desapareciendo lo que eran las parejas de toda la vida. Y con ello, todos esos sentimientos y sensaciones que hacen que subas en una nube y no quieras bajar. ¿A quién no le gusta que le sorprendan con un regalo, con un beso? ¿Quién no quiere sentir ese cosquilleo que recorre el cuerpo cada vez que te hacen una caricia, cada vez que te dicen te quiero, pero de verdad?

¿Todos/as, no es cierto? ¿Pues animaros/as a encontrar a esa persona? Olvidaros de lo que se está convirtiendo en una plaga, de ese dicho de usar y tirar, de aprovecharse de las personas, de abusar y de reírse de ellas, haciéndote daño a ti mismo/a. Al final solo tendrás una lista de personas que pasaron por tu vida y se fueron de la misma manera, dejando un velo de tristeza en ti y dejándote solo/a, solo con una experiencia que crees que sirve para pavonearse.

No vale decir que envidia me das. Yo solo hago lo que me dice el corazón y por ello me considero afortunada, porque ya son 5 años.